A todas nos da miedo, como toda madre. Pero eso no quiere decir que no lo vas a querer...
Tengo 20 años. En mi flia tengo mi primo discapacitado. Es mi hermano, porque con mis 3 hermanos, nos criamos juntos. Tiene RETRASO MENTAL, tiene 23 años, y tiene la mente de un niño. Igualmente es muy vivo e inteligente. No sabe leer, ni escribir, no sabe números, no sabe su edad, no sabe dias, ni meses, ni años, ni su fecha de cumpleaños, etc.
Pero si sabe hablar, caminar, correr, agarrar, comer, tiene una vista hermosa, sabe ir al baño solo cuando él lo desee. Sabe querer, es muy cariñoso, amoroso, sensible. Nos dice que nos quiere, nos dice que nos ama, nos pregunta si lo queremos. Él no sabe nada de embarazo ni esas cosas, pero ya le he dicho que voy a tener un bebé, al principio no quería que yo tuviera un bebé, pero lo fui convenciendo. Y ahora hasta dice que va a ser nena, porque dice que las nenas lo abrazan, y los nenes lo joden

jaja. Me mira siempre la panza, me pregunta qué es, como se va a llamar y todo!
Tiene terror a las vacunas, e inyecciones. Y así un montón de cosas. Pero lo más importante, ES MUY FELIZ. Lo demuestra, nos dice. Y sobre todo, sabe que es diferente a los demás.
Estamos muyy pero muy agradecidos por este ángel que tenemos, cada día aprendemos mucho con él.
Dios nos lo mandó para que veamos el sentido a nuestras vidas.
Nadie se burla, nadie lo toca, porque se meten con nosotros.
Yo tengo 17 semanas de embarazo, hasta ahora gracias a Diosito mi bebé viene sanito. Obviamente que no sé si vendrá con un retraso mental, autista, sordo mudo, etc, pero estoy segura que si viene con alguna discapacidad voy a saber amar y criar a mi bebé gracias a nuestro ángel. Simplemente es una bendición.
Creo que si tenes un familiar con discapacidad diferente, lo deberías saber.
Somos muy feliz con tenerlo, porque mas allá de todo, es muy sano y fuerte. Cuando el padre (discapacitado, tiene la mitad del cuerpo paralizado, pero anda)se lo lleva unos dias, lo extrañamos horrores, y él a nosotros.
Obviamente no nos pone feliz que sea así, porque nos hubiera encantado verlo hacer su vida, estudiar, trabajar, formar familia.
Pero Dios quiso que su lugar estuviera con nosotros. Y es la mayor bendición y orgullo de nuestras vidas.
Se que va a querer mucho a mi bebé, y voy a enseñarle a mi bebé a quererlo y respetarlo.