Carta a mi agresor

Aún cuando se que quizá nunca leeras esto, he decidido escribirtelo hoy despues de tantos años. No sé ni tu nombre, ni donde vives, no sé si tendrás familia, tampoco se si sigues practicando ese deporte de hace algunos años, incluso no sé si aún sigues teniendo contacto con esos "mis amigos", realmente no sé nada de ti, ni siquiera se si te arrepentiste en algún momento de lo que hiciste o seguiste siendo ese que hizo conmigo lo que quiso, sólo sé que durante muchos años atormentaste mi vida, que por muchos años me hiciste sentir que no valía, incluso me hiciste odiar el número 8 sólo porque ese era tu sobrenombre. ¿sabes? Creo que ya no te odio, al menos no con la rabia con que te odiaba hace unos años. No sé exactamente que es lo que siento por ti, al inicio fue una mezcla de odio, de rabia, de coraje.. pero hoy despues de 5 años creo que sólo hay algo que puedo sentir por ti y es lástima. Siento lástima de ver que tan miserable tuvo que ser tu vida como para haber dañado la mía, lástima de ver que nunca fuiste capas de dar la cara mínimo para pedir perdón, para saber que había pasado con esa niña a la que le cambiaste la vida. Te odiaba tanto, llegué a desear tu muerte e incluso la de todo tu equipo de americano, porque fueron muchos los que estuvieron ahí y ninguno fue capaz de ayudarme aún cuando suplique por ayuda, llegué a desear que eso que me hiciste a mi te lo cobraran con quien más quisieras porque fuiste tan egoista, tan poco hombre pero me di cuenta que al desear eso me estaba convirtiendo en un ser igual de miserable que tú y al menos yo si me arrepentí de haberlo deseado. No tienes idea de cuanto me arrepiento de confiar en esos que se llamaron "mis amigos", esos que me hicieron coincidir en el mismo lugar contigo, esos que una hora antes le habían dicho a mis papás que no se preocuparan que todo iba a estar bien, esos que al día siguiente cuando buscando justicia tuve que tener el valor de contarle a un extraño lo que me habías echo solamente te protegieron pues nunca dijeron tu nombre, esos que que un día sin ser vistos se acercaron a mi solamente a decirme que ellos no podían decir lo que realmente había ocurrido aún cuando uno de ellos vio todo lo que había pasado, aún cuando escucho que le gritaba que te quitara de mi, que no me hicieras daño. ¿Sabes el dolor que me causaste? No creo que tengas ni la más mínima idea de lo que era tener que levantarte cada día a poner una sonrisa todo el día y por dentro estar deseando morirte. No lo creo porque me imagino que no sabes el dolor que provoca lo que me hiciste, porque si lo supieras no lo hubieras echo. Y no lo niego cambiaste mi vida, aún después de 5 años me seguía afectando lo que me hiciste ese día.
Tu desapareciste de mi vida, pero quedó lo peor, las secuelas de lo que me hiciste, el odio y la amargura era lo que prevalecía en mi. Pero sabes en parte hay algo que te debo a ti y a todos aquellos, me enseñaron de la peor manera a no confiar.
Hoy después de tanto tiempo por fin llegó alguien a mi vida, alguien que me enseñó que soy más fuerte de lo que pensaba, alguien que me enseñó que no todos son unos malditos, alguien que me enseñó que había razones para salir adelante, alguien que me salvo de ti, de tu recuerdo. Fueron 5 años sin poder casi tocar el tema, de mantenerme en silencio, de creer que de tanto gritar ese día había incluso perdido mi voz. Pero esta carta es lo último que quiero dirigir a ti, porque decidí enterrar ese odio que te tenía junto con el mal recuerdo que me dejaste.
Esta vez quiero matar tu recuerdo, se lo debo a quien hoy esta conmigo y me lo debo a mi misma, se lo debo a esa niña de 15 años a la que le mataste sus sueños, sus ganas de vida, me lo debo a la mujer que soy ahora. Esa mujer que después de 5 años decidió ser felíz, decidió que tu marcaste una parte de su vida pero que no vales la pena para marcar el resto de ella.
Hoy, después de 5 años, sólo tengo algo que decirte.. Te perdono de todo corazón, te perdono a ti y a todos esos que no fueron capaces de ayudarme. Te perdono no porque lo merezcas, sino porque es más el daño que me hace odiarte. Te perdono todo, porque hoy estoy dispuesta a olvidarte, de todo corazón no te deseo que vivas el mismo infierno que viví yo, al contrario, te deseo que nunca lo sufras. Te perdono de tal manera que hoy olvido incluso que algún día coincidimos.
Tu desapareciste de mi vida, pero quedó lo peor, las secuelas de lo que me hiciste, el odio y la amargura era lo que prevalecía en mi. Pero sabes en parte hay algo que te debo a ti y a todos aquellos, me enseñaron de la peor manera a no confiar.
Hoy después de tanto tiempo por fin llegó alguien a mi vida, alguien que me enseñó que soy más fuerte de lo que pensaba, alguien que me enseñó que no todos son unos malditos, alguien que me enseñó que había razones para salir adelante, alguien que me salvo de ti, de tu recuerdo. Fueron 5 años sin poder casi tocar el tema, de mantenerme en silencio, de creer que de tanto gritar ese día había incluso perdido mi voz. Pero esta carta es lo último que quiero dirigir a ti, porque decidí enterrar ese odio que te tenía junto con el mal recuerdo que me dejaste.
Esta vez quiero matar tu recuerdo, se lo debo a quien hoy esta conmigo y me lo debo a mi misma, se lo debo a esa niña de 15 años a la que le mataste sus sueños, sus ganas de vida, me lo debo a la mujer que soy ahora. Esa mujer que después de 5 años decidió ser felíz, decidió que tu marcaste una parte de su vida pero que no vales la pena para marcar el resto de ella.
Hoy, después de 5 años, sólo tengo algo que decirte.. Te perdono de todo corazón, te perdono a ti y a todos esos que no fueron capaces de ayudarme. Te perdono no porque lo merezcas, sino porque es más el daño que me hace odiarte. Te perdono todo, porque hoy estoy dispuesta a olvidarte, de todo corazón no te deseo que vivas el mismo infierno que viví yo, al contrario, te deseo que nunca lo sufras. Te perdono de tal manera que hoy olvido incluso que algún día coincidimos.