Yo tuve dos pérdidas: una en julio de 2018 y otra en octubre. El primero fue anembrionado y el segundo, se le paró el corazón sin más. En ambos estaba de 7 semanas. Ahora estoy embarazada de nuevo de 7 semanas y la angustia es increíble. La incertidumbre de no saber si te va a pasar lo mismo es muy difícil de llevar. Pero confío en que Dios lo mantenga en mi vientre hasta noviembre que le toque nacer. Ánimo, no pierdasla esperanza que cada embarazo es diferente del anterior y no tiene porqué pasarte lo mismo.
